Consejos y secretos para entrenar en vacaciones

Enero es sinónimo de playa, montañas, mar, río… La temporada alta de vacaciones comenzó hace una semana: algunos ya están disfrutando del aire libre y el relax y otros están tachando los días para comenzar a disfrutar… ¿pero cómo? ¿Sólo echándonos a ver el paisaje? ¿Qué pasa con el entrenamiento? ¿Queda en casa o se sube al micro? ¿Y cómo tenemos que organizarnos para poder hacer todo lo que queremos sin dejar de lado nuestras metas?

Está claro que el período de receso laboral es importante para realizar un análisis introspectivo, pero a la vez nos obliga a escuchar a nuestro cuerpo. Esto no implica bajar a cero las revoluciones -recordá que la constancia es uno de los puntos fundamentales del éxito del entrenamiento- como así tampoco sobreexigirnos. Lo que pesará, en este verano, será el balance: cumplir metas cortas, alcanzables, y no dejar de lado lo más importante, que es el descanso.

Quizás una metodología interesante para encarar los viajes -o la estadía en casa, si es que no elegiste un destino de larga distancia- es pensar una grilla con días específicos para entrenar que no interrumpan, así, el disfrute. Incluso cuando a veces es posible combinar las dos cosas: caminar por la playa o la montaña; pedalear; nadar en un río, el mar o la pileta; o -si sos socio de SportClub- aprovechar los gimnasios más cercanos en la Costa Atlántica en este ratito por la mañana o la tarde en el que el resto de la familia elige, quizás, otro plan de descanso…

Sin embargo, debemos contemplar a la vez que el secreto no está en hacer todo junto: el concepto de “ganar tiempo”, de “aprovechar para hacer todo lo que no pude”, puede resultar perjudicial: los excesos pueden provocarnos lesiones, del mismo modo que las dietas extremas, sin monitoreo médico. Porque la alimentación siempre será un pilar fundamental para una vida sana.

En ese sentido, si en las últimas semanas del año dejamos de entrenar por obligaciones laborales o personales, no debemos retomar los trabajos al máximo sino pensar en un arranque progresivo, evitando la intensidad pico de arranque y considerando siempre la posibilidad de consultar con tu profe de salón ante cualquier duda: los profesionales de SportClub están a disposición para orientarte y asesorarte para que tu programa de entrenamiento de vacaciones sea el adecuado para vos.

Por supuesto, un buen entrenamiento implicará el calzado adecuado para caminar, correr o hacer trabajos específicos de gym -nada de ojotas: dejá un espacio en el bolso para las zapatillas- y también el tener a mano la ropa idónea para ejercitar, recordando que las prendas livianas, que permitan la evaporación de la sudoración, y de colores claros, son las más adecuadas para movernos al aire libre. Y que siempre es importante tener a mano una botella de agua fresca o caramañola con bebidas isotónicas para rehidratarnos. ¿Todo listo? A disfrutar.